Lee la historia completa desde el Fragmento N°1
Un coro de sonidos emanaba de la jungla, inundando cada recodo, brindando la sensación de que cada palmo de selva estaba vivo. El oleaje lograba sobreponerse ocasionalmente a ese sonido, en esos instantes la brisa traía consigo el ruido de la rompiente, generando una sensación de tranquilidad.
Greg sabía que ese sonido era bueno, su experiencia le indicaba que el silencio suele ser un mal indicio. Recordaba algunas de las lecciones de su padre, en su mente la voz del viejo revivió “La vida en la jungla suele apagarse siempre ante la misma causa, la presencia del hombre. Sugiero que reacciones rápidamente al silencio, o la nada misma será lo último que oigas en esta vida”.
Sonrió por dentro, las palabras del viejo tocaban una fibra especial dentro de su cuerpo, que le generaba tristeza y orgullo al mismo tiempo.
Gregor alzó su vista, la luna yacía imponente sobre el firmamento, semi oculta entre ráfagas de nubes que a toda velocidad atravesaban su luz blanca y omnipotente.
Con voz lenta y pausada comenzó a recitar el plan.
A medida que avanzaba, quedo claro que había una serie de sucesos que serían de vital importancia y que de ellos dependería el éxito o el fracaso del rescate.
En primer lugar, Mnyma debería regresar solo y a pie hasta la guarnición. Greg comprendía que el niño ya era conocido por los guardias de la ciudadela, y que desconociendo que este ahora era libre, le permitirían regresar al interior de la ciudad para volver con su “dueño”.
Luego el pequeño debería escabullirse por el interior del cuartel, llegar a los establos, para así adentrarse en el pasadizo que conectaba con la escotilla del acantilado.
Allí esperaría el resto, en el pequeño bote, para realizar la incursión y rescatar a Edahi.
Cuando finalizo la explicación, Hicks habló: —Si mal no he entendido, el éxito de nuestra modesta empresa, depende prácticamente de este niño, ¿verdad?—
Greg en silencio asintió.
Hicks algo malhumorado dijo:—Por otro lado, usted dijo que golpearíamos primero a Hein, ¿Cómo haremos eso?—
Esta vez sonriendo, Greg dijo:—De eso se encargara Arthur, hemos preparado una sorpresa para nuestro amigo—