Fragmento N°156

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Al emerger del reparo de su posición, Greg se percató que el soldado de la guarnición estaba sustancialmente más cerca de lo que él consideraba, por lo cual casi lo golpea con el cañón de su arma al disparar. Con un sonido seco, la bala penetró en el tórax del sujeto ingresando desde la parte superior y atravesando su torso en su trayectoria hacia el suelo.

No logró visualizar el daño que había provocado en el pobre individuo ya que el soldado que se encontraba a su lado reaccionó inmediatamente y debió contenerlo. El sujeto, al ver a su compañero herido mortalmente por un enemigo del cual no se habían percatado, giró para enfocar su mosquete en dirección a Greg.

El Celta, con un golpe rápido de su chafarote, desvió el cañón en el momento justo antes de que este escupiera una bocanada de humo y estallara casi a quemarropa. Al ver que ya no contaba con su arma de fuego, el soldado se desprendió de su mosquete y desenvainó su espada poniéndose de pie.

Mientras Greg daba un pasó hacia adelante para entablar combate cuerpo a cuerpo, Favre se adelantó para interceptar al tercer soldado de la escuadra. El tercer hombre, intentó girar para colocar en rango de tiro al galo, pero el cuerpo de su propio compañero trenzado con Gregor le impedía apuntar correctamente. Para cuando logró moverse para encuadrar su tiro, el galo estaba encima de él, y en vez de disparar debió alzar su arma para contener la estocada que Favre intentaba asestarle.

Intentando romper la defensa de su enemigo Greg pudo observar que algo similar ocurría con Hein, Roger, y el marino holandés superviviente. Luego de la primera andanada, los holandeses se habían lanzado sobre la escuadra mas próxima.

Greg lanzó una finta al estómago para captar la atención de su contrincante, el sujeto respondió y entones Gregor desvió el golpe para impactar en el hombro donde realmente deseaba herirlo, logró realizar un corte limpio que inutilizó el brazo derecho del sujeto. Antes de que El Celta pudiese golpear nuevamente, un tumulto invadió el edificio, mientras una docena de soldados ingresaban en ayuda de sus camaradas en aprietos.

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