Fragmento N°247

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En cuanto Elizabeth tomó uno de los palanquines, fue el tirón necesario para que el cañón rompiera la inercia y se moviese hasta su posición de disparo. La mano derecha de Favre se encontraba imposibilitada de realizar cualquier esfuerzo. Si bien no había perdido demasiada sangre, algunas de las esquirlas habían dañado sus articulaciones y no podía contraer su puño.⠀

El galo quedó inmóvil observando su mano e intentando que esta reaccionase. Mientras tanto, Elizabeth se percató de lo que estaba sucediendo y ocupó el lugar del artillero caído para lograr alimentar el arma lo más pronto posible. Ella había oído los disparos de la nave de su padre y El Retiro, sabía que en cuanto ellos estuviesen listos para disparar, era altamente probable que El Mercurio también lo estuviese. Repentinamente su cuerpo tambaleó cuando la nave dio un giro brusco a babor y comenzó a separarse de la ruta de intercepción de los holandeses.⠀

Mientras finalizaba la tarea de recarga junto a otros tres marineros Elizabeth alzó la voz para que Favre la oyera:—¿Gregor está demente? Estamos dándoles la espalda, ¡exponiendo el timón!—⠀
Favre se había apoyado contra uno de los mamparos mientras mordía un trozo de su camisa para vendar su brazo. Al lograr extraer un retazo de su manga, liberó su boca y respondió:—Confíe Srta Hein, es parte del plan.—⠀

Ella frunció el ceño, desconocía lo que Gregor tramaba, los detalles de la maniobra habían sido coordinados mientras yacía en el camarote principal junto a Mnyma y Edahi. Finalmente tomó el lugar de Antoine, y se colocó detrás de la culebrina para poder disparar, pero el ángulo de tiro había cambiado. Al girar a babor, habían dejado fuera de rango a las baterías de estribor, y ahora la popa de la nave estaba expuesta al fuego de todos los cañones holandeses.⠀

Elizabeth cerró los ojos, fue como si anticipara el impacto de lo que sabía estaba por suceder. Su reloj interno le indicaba que dispararían en cualquier instante.⠀

Numerosas detonaciones resonaron a la distancia, y un segundo más tarde la estructura entera de la nave se estremeció al ser alcanzada en la parte trasera. El cambio de curso también generó que El Retiro redujera su silueta, exponiendo solo la popa, sustancialmente más angosta que la eslora completa. En contraposición, la popa dejaba vulnerable el timón de la nave, y sus mamparos eran menos resistentes a los proyectiles.⠀

Algunos disparos sin embargo, lograron conseguir el ángulo suficiente como para penetrar por estribor antes de que la nave terminara de completar el giro para alejarse de los holandeses. Las descargas alcanzaron la batería del extremo opuesto, la más cercana a la popa, diezmando a sus operadores. ⠀

En el caos, Elizabeth no logró percatarse qué tan grave era el daño para los marinos. Una niebla fina de pólvora quemada y humo cubría la cubierta interior.⠀

Volvió a elevar su voz consultando a Favre:—¿Eso también ha sido parte del plan?— en referencia al daño sufrido por la popa.⠀

El galo trataba de anudar su improvisado vendaje mientras respondía:—Aunque usted no lo crea, la respuesta es sí, Srta Hein.—⠀

Procesando…
¡Lo lograste! Ya estás en la lista.

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