Lee la historia completa desde el Fragmento N°1
Era necesario mostrar firmeza frente a los prisioneros. Sin dudarlo Nock entrego el farol a Greg, y este dio un paso más hacia el rincón izquierdo, adentrándose en la habitación. Extendió el farolillo con su brazo hacia los cuerpos aterrados que se encontraban en ese extremo. Oyó como las cadenas en los pies de cada pobre alma trinaban mientras estos intentaban sin éxito alejarse de Él y de la luz, como si de un maleficio se tratara. Se colocó en cuclillas y allí lo vio con claridad, o al menos con la mayor claridad que se le permitía en esa habitación. De los doce prisioneros, dos mostraban extremidades y cuerpos más delgados y esbeltos que el resto, al entrar en el rango de la luz que emanaba del farol, los ojos ámbar de una de las dos mujeres brillaron en la oscuridad.
Greg murmuró en voz baja pero clara para que todos pudieron oírlo: —Señor Nock, creo que usted omitió informarme que dos de nuestros invitados son dos hermosas damiselas—
Hubo una breve pausa, donde sin necesidad de voltear, Greg notó el nerviosismo y la duda de Nock a sus espaldas. —Disculpe capitán, no lo creí relevante, y tenía intenciones de dejarlos en el primer islote que avistáramos. Pero las circunstancias cambiaron y me temo que eso no va a ser posible. —
Él nerviosismo de Nock tenía su razón de ser, a su experiencia y consejos de su padre, no es bueno tener mujeres a bordo, una mujer a bordo y para colmo de prisionera, era suficiente, pero él tenía dos. Mientras sus pensamientos de ordenaban en su mente, notó como ambas temblaban de terror, abrazadas la una a la otra, acurrucadas en el suelo, con lágrimas en sus ojos y balbuceando en voz baja, a lo que Greg pudo interpretar como plegarias. Lo inquietó el ver que esos ojos ámbar, si bien tenían miedo, seguían fijos en él.
Se irguió sobre sus pies nuevamente, con un ademan le indicó a Nock que sostuviera el farolillo y con voz desestructurada enuncio: —Damas y caballeros, perdonen mi inusitada falta de modales, espero puedan comprender los infortunios que se han desencadenado, provocando que su estadía en este recinto se extienda más de lo planeado. —